:: Postrarse ante Él :: - Pastor Agnaldo Silva

“Y cuando salió Él de la barca, en seguida vino a su encuentro, de los sepulcros, un hombre con un e s p í r i t u inmundo, que tenía su morada en los sepulcros, y nadie podía atarle, ni aún con cadenas. Porque muchas veces había sido atado con grillos y cadenas, mas las cadenas habían sido hechas pedazos por él, y desmenuzados los grillos; y nadie le podía dominar. Y siempre, de día y de noche, andaba dando voces en los montes y en los sepulcros, e hiriéndose con piedras.” (Marcos 5:1-5)

Este hombre, poseído con demonios, que vivía en el cementerio y dormía en las tumbas, nadie podía atarlo ni aún con cadenas ni grillos, porque muchas veces había sido atado y ya había hecho pedazos las cadenas y los grillos. ¿Qué supone usted que comía él, de que se alimentaba? Era un hombre que si tenía esposa o hijos ya los había perdido, no tenía ningún bien, ni siquiera ropa porque andaba desnudo.
Pero, cuando miró a Jesús, aprovechó la oportunidad, quizás era su única oportunidad y corrió y se postró delante del Señor Jesús ¿qué quería él? Quería misericordia, quería sanarse del cuerpo y de su mente, porque los demonios lo habían transformado en una persona indigente, él quería recuperar su vida y al postrarse delante de Jesús lo consiguió. Esa misma actitud el Señor Jesús está esperando hoy de cada uno de nosotros, si usted también quiere recuperar sus sueños, su salud, su familia, su economía, si usted quiere recuperar algo que ha perdido, todavía puede hacerlo, sólo tiene que hacer lo mismo que aquel hombre hizo, tiene que ser humilde y p o s t r a r s e delante de Dios.
“Cuando vio, pues, a Jesús de lejos, corrió, y se arrodilló ante él. (Marcos 5:6)
Los demonios pretendían acabar con la vida de él. Pues todas las personas poseídas por espíritus malignos en algún momento tienen el pensamiento de quitarse la vida, pero no lo consiguieron ya que él fue liberado completamente.
“...Al entrar Él en la barca, el que había estado endemoniado le rogaba que le dejase estar con él. Mas Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti. Y se fue, y comenzó a publicar en Decápolis cuán grandes cosas había hecho Jesús con él; y todos se maravillaban.” (Marcos 5:13-20)
Ahora, después que el mal salió, él estaba en su juicio cabal, era otro, el cambio que había por dentro se reflejaba también por fuera.
La pregunta es: ¿está usted también dispuesto a vivir esta formidable experiencia?, cuando usted se postra delante del Señor Jesús, Él nos libra de todos los males y después espera que usted salga a decir a toda la gente las maravillas que Él ha hecho en su vida, El Señor Jesús espera que usted que todavía no ha entregado su vida a Él, lo haga ahora.

0 comentarios :

Mucho mas que un Blog. Somos: Ayuda Universal.
Una Mano amiga para Usted que esta Precisando un Auxilio de Dios

Seguidores